Recientemente hablamos con Karla Blanco sobre su infancia y cómo las experiencias de esos primeros años en Costa Rica influyeron en su vida hasta convertirse en la autora bestseller y la directiva global de una corporación del Fortune 100.
Ella nos explicó que nuestro origen marca nuestro destino, pero no lo determina.
“Uno es quien toma la decisión de qué hacer con ese origen, y define su destino a partir de sus decisiones y acciones del día a día”.
Pero ese no es el único mito que Blanco quiere romper…
Muchas mujeres hemos escuchado que no podemos tenerlo todo; que debemos elegir entre ser madres o profesionales de renombre. Pero ella considera que es mejor madre, precisamente gracias a su trabajo en el mundo corporativo y a la pasión que le dedica a su carrera profesional.
Por eso, quisimos ahondar un poco más en quién es Karla Blanco como madre y en sus otros roles de vida.
Además de tu cargo directivo en una empresa del Fortune 100 y de tu rol como escritora, ¿a qué otras cosas te dedicas?
El rol de que me siento más orgullosa es la maternidad. Soy madre de Andrés, un joven de 21 años, estudiante universitario, trabajador, deportista (practica ciclismo de montaña) y emprendedor (que lanzó su propia colección de joyería a los 15 años).
Andrés es mi motor; él es una mezcla de la herencia y enseñanza de mis padres y abuelos paternos. Es soñador pero realista. Además, al igual que mi papá, Andrés es muy bueno creando vínculos con las personas. Excelente negociador.
Cuando yo me estaba divorciando, una psicóloga me recomendó que dedicara una hora al día a jugar y estar con mi hijo, completamente presente, sin celulares ni distracciones. Ese espacio es para fortalecer la relación, conocerlo mejor, escucharlo y construir juntos. Es una práctica que mantengo hasta ahora.
Entonces, ¿tu historia es ejemplo de que una mujer sí puede ser una madre presente y al mismo tiempo desarrollar una carrera brillante y en ascenso?
Por mi experiencia sé que sí es posible ser una madre presente y exitosa a nivel profesional. Lo importante es estar presente emocionalmente en la vida de nuestros hijos y aprovechar el tiempo de calidad.
Incluso hay estudios de la Universidad de Harvard que demuestran que los hijos de mujeres profesionales o que trabajan fuera del hogar son más independientes y desarrollan otras ventajas importantes para la vida.
Sin embargo, para mí, no importa el modelo de maternidad que una elija, mi recomendación para cualquier mamá, trabaje fuera del hogar o no, es que se conecte al menos una hora al día con su hijo individualmente; si son varios hijos, que alterne al menos un día de la semana para cada uno; esa conexión les hará crecer con mucha confianza en sí mismos y mejorará el vínculo entre madre e hijo. Lo mismo aplica para los padres.
A parte de la maternidad, ¿qué otros roles cumples hoy en día?
Como cualquier otra persona, soy multifacética. Soy hija, hermana, tía, prima, amiga… buceadora certificada y bailarina.
Soy coach y facilitadora de liderazgo de “The John Maxwell Team”; y brindo asesorías a empresas que quieren expandir el potencial de sus colaboradores y desarrollar estrategias que los lleve al siguiente nivel, ayudándoles a obtener mejores resultados en términos de rendimiento, productividad e impacto.
Eso es algo que me ha encantado siempre, identificar el potencial de la gente. De hecho, mi libro “Expande Tu Potencial” es la culminación de diferentes procesos de mi vida que me fueron ayudando a mí a entender quién era yo y cómo podía expandir ese potencial y poder compartirlo con los demás.
Además, actualmente estoy desarrollando un nuevo modelo de liderazgo que será el tema de mi próximo libro, del que espero hablarles muy pronto.